Cada 11 de diciembre desde el año 2002 se celebra el Día Internacional de las Montañas, un ecosistema frágil que hay que proteger y que tiene cabida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030, más concretamente en el Objetivo Número 15.
Las montañas cubren el 22 por ciento de la superficie de La Tierra y albergan el 15% de la población mundial y aproximadamente la mitad de la reserva de la diversidad biológica del mundo. Por eso su conservación resulta clave.
Se puede mencionar también que más de la mitad de la población mundial depende de las montañas para abastecerse de agua, alimentos y energía, pues aportan entre el 60 y el 80 por ciento del agua dulce del planeta, muchas comunidades que viven en regiones altas dependen de las mismas, pero también dependen de ellas pueblos que viven en las zonas bajas y juegan un papel fundamental en la generación de energías renovables, especialmente, la energía hidráulica, solar, eólica y el biogás.
En el 2021 el tema del Día Internacional de las Montañas será: «El Turismo Sostenible en las Montañas». Las montañas son un recurso que atrae cada vez a más turistas. Y ello crea oportunidades para poner en valor la economía de las pequeñas localidades ligadas a las montañas: la artesanía, la gastronomía, y otras actividades relacionadas.
El turismo de montaña contribuye a crear medios de subsistencia adicionales, a mitigar la pobreza, además de la biodiversidad y la conservación del paisaje. Los turistas de montaña quieren encontrar naturaleza pura y eso hace que tanto ellos como los locales cuiden más el entorno.
El turismo de montañas representa del 15 al 20 por ciento del turismo mundial. En la actualidad, este sector es uno de los más afectados por la pandemia COVID-19, golpeando las economías, los medios de vida, los servicios públicos y las oportunidades en los cinco continentes. En las montañas, las restricciones impuestas por la pandemia han agravado las vulnerabilidades de las comunidades montañesas.
Esta situación puede percibirse como una oportunidad para reinventar el turismo en las montañas y sus impactos en los recursos naturales y en los medios de vida, mejorar la gestión del mismo y encaminarlo hacia un futuro más resiliente, más ecológico y más inclusivo.
Las montañas, junto al resto de los recursos naturales, los animales y las plantas representan la gran biodiversidad de nuestro planeta. La pérdida continua de los bosques, montañas, mares, también constituye una gran pérdida para toda la humanidad.
Por eso su conservación resulta clave.
Fuente: ONU, https://www.diainternacionalde.com