El presidente de la Comisión de Seguridad de la Asamblea Nacional, Ramiro Narváez, defendió la aprobación de la Ley de Uso Legítimo de la Fuerza. Así, celebró los derechos que ahora el cuerpo legal entrega a los policías. Lo dijo en diálogo con A Primera Hora, de Sonorama.
En esa línea, el asambleísta explicó que, si después de hacer un uso legítimo de la fuerza, la justicia inicia una investigación contra el policía, este podrá contar con patrocinio desde el Estado.
Otro punto trascendental para el Legislador es la capacitación y entrenamiento que la ley obliga que tenga el policía. “Había policías que no habían disparado un arma desde 2009, ¿cómo iban a desarrollar destrezas y habilidades para enfrentar al crimen?”, criticó. Así, señaló que ahora es obligatorio que los agentes tengan la provisión necesaria, armas, municiones, trajes de protección; además, si pasa algo con su vida, su núcleo familiar no queda desamparado, sino que cuenta con un seguro.
Los aspectos a favor de los policías
Narváez lamentó que, previo a la Ley, los policías no conocían en qué momentos debían actuar contra la delincuencia. Así, destacó que la Norma elimina algunos mitos como la progresividad de la fuerza. Por ejemplo, explicó que existen seis niveles de fuerza que inician desde la presencia del policía y concluye en el uso de un arma letal. “Se creía erróneamente que el policía debía iniciar desde el nivel 1 y, si es de vida o muerte, llegar al 6. Hoy queda eliminado ese mito. El policía puede iniciar en cualquiera de los seis niveles dependiendo del grado de peligrosidad y amenaza”, mencionó.
Con ese contexto, también resaltó la temática sobre la proporcionalidad. Así, antes de la Ley, el policía creía que si el delincuente tenía un arma blanca, debía buscar un arma similar. Esta concepción queda eliminada y la Ley establece que si el delincuente está a punto de matar a un ciudadano con un cuchillo, el policía puede usar el arma que considere necesaria.