Para la especialista en Planificación y Descentralización de Gobiernos Autónomos, María Caridad Vásquez, los ciudadanos necesitan un Ecuador que tenga un Estado que sirva a la sociedad y que profundice la democracia. Así, resaltó que se debe revisar si el diseño del Estado responde a la propuesta de interculturalidad y plurinacionalidad y que dé respuestas a las necesidades en torno a salud, educación, seguridad, servicios públicos y que cumpla el artículo 1 de la Constitución, “que es potente, pero hay que evaluar el tipo de Estado que tenemos”.
Por ello, señaló que el exalcalde de Guayaquil y líder del Partido Social Cristiano, Jaime Nebot, no hizo una propuesta, sino fue una idea “en un par de minutos que no nos permite saber ni la forma ni el fondo de esto”.
¿Lo permite la Constitución?
De acuerdo con la especialista, la actual Constitución ecuatoriana no permite el diseño de un Estado federal. Así, explicó que el federalismo nace en las crisis de los 70’ y 80’ en Brasil y Argentina. Es decir, se dio a partir del consenso social y popular.
En esa línea, Vásquez enfatizó que no es muy recomendable mirar al federalismo para que los estados compitan por recursos. Por el contrario, existe “otro tipo de federalismos que podrían tener un sistema híbrido para Ecuador”.
Con ese antecedente, dijo que el Estado no alcanzó a responder en los días del paro nacional de junio de 2022. Tuvo que intervenir la iglesia. “El estado continúa complejizando las relaciones, no está respondiendo democráticamente a la ciudadanía”, criticó.
El estado federal
La especialista manifestó que el estado federal es un Estado nación compuesto por estados internos que se autodeterminan. Es decir, tienen sistemas políticos internos que promueven esa autonomía a través del eje político con administración propia, eje administrativo y fiscal donde puede tener recursos y parlamentos propios.
Por ejemplo, identificó a Alemania, en el que el consenso de todos los estados es prioritario.