El exgerente de la Agencia de Garantías de Depósitos (AGD), Carlos Bravo Macías, explicó todo el proceso que siguieron para la incautación de los bienes a los hermanos William y Roberto Isaías. Así, resaltó que la base de tal fue un informe de una de las empresas auditoras más grande del mundo, Deloitte & Touch. Además, dijo que el documento determinó que las pérdidas de Filanbanco arrojaban un monto de $661,5 millones.
Tal informe lo aprobó la Junta Bancaria que decidió realizar el proceso de incautaciones de acuerdo a lo dispuesto en la Ley de la AGD, en su artículo 29. También, recordó que tras recibir Filanbanco quebrado, al siguiente día el Estado inyectó $140 millones y, a los 30 días, le dio $300 millones. “¿En dónde quedan las pérdidas?, ¿en dónde quedan esos $661,5 millones que fueron determinados hace más de dos décadas?”, enfatizó.
La sentencia a favor de los Isaías
Bravo señaló que los jueces dispusieron la devolución de los bienes a los Isaías basados en una opinión de María Josefa Coronel. Ahora ella es directora provincial del Consejo de la Judicatura en Guayas.
Coronel recomendaba que debía acatarse lo resuelto por el Comité de ONU “porque la obligación de cooperación con el Comité resulta de la aplicación del principio de buena fe a la que el país está obligado a ajustarse y por el reconocimiento como un órgano imparcial independiente que resuelve en base a la evidencia presentada con espíritu judicial y comprenderá la interpretación del lenguaje del pacto y del carácter determinante de sus decisiones”.
“Esta es la base país para que se cometa este nuevo atraco por parte del capo Di Tutti Capi Roberto Isaías Dassum”, criticó el exgerente de la AGD. Además, cuestionó la cercanía que tendría Coronel con el abogado de Roberto Isaías Dassum.