Seis estadounidenses que habían estado detenidos en Venezuela en los últimos meses fueron liberados por el gobierno del presidente Nicolás Maduro, luego de que éste se reuniera este viernes, 31 de enero, con un alto funcionario del gobierno norteamericano encargado de instar al mandatario sudamericano a aceptar de vuelta a migrantes deportados que han cometido delitos en Estados Unidos.
El presidente estadounidense Donald Trump y su enviado para misiones especiales, Richard Grenell, anunciaron la liberación de los seis hombres en redes sociales.
Según la Casa Blanca, el viaje de unas cuantas horas de Grenell a Venezuela se centró en los intentos de Trump para deportar a venezolanos de regreso a su país natal, que actualmente no los acepta, y en la liberación de los estadounidenses detenidos.
‘Despegamos y nos dirigimos a casa con estos seis estadounidenses’, escribió Grenell en la red social X junto con una fotografía donde aparece con los hombres a bordo de una aeronave.
‘Acaban de hablar con Donald Trump y no podían dejar de darle las gracias’.
La reunión en la capital de Venezuela tuvo lugar menos de un mes después de que Maduro prestara juramento para un tercer mandato de seis años, pese a que la oposición asegura que su candidato Edmundo González ganó los comicios.
Durante la firma de una orden ejecutiva en la Oficina Oval el viernes, le preguntaron a Trump si el hecho de que captaron a Grenell reuniéndose con Maduro daba legitimidad a un gobierno que la Casa Blanca no ha reconocido oficialmente.
‘No. Queremos hacer algo con Venezuela. He sido un gran opositor de Venezuela y Maduro’, respondió Trump. ‘No nos han tratado muy bien, pero lo que es más importante, han tratado al pueblo venezolano muy mal’.
A través de un comunicado, la Administración chavista indicó que, durante el encuentro, celebrado en el palacio presidencial de Miraflores, Maduro “planteó la construcción” de una “agenda cero para un nuevo comienzo en las relaciones bilaterales”, rotas desde 2019.
Sin embargo, Washington -que reiteró este viernes que no reconoce a Maduro como presidente- asegura que la misión de Grenell en Venezuela es “muy específica” y tiene el objetivo de lograr que Caracas acepte vuelos de deportación de migrantes indocumentados y conseguir la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en cárceles venezolanas.
En paralelo, Trump aseguró que no permitirá la compra de petróleo a Venezuela como hizo su antecesor, Joe Biden, quien alivió el esquema de sanciones con la emisión de licencias a empresas extranjeras, entre ellas, la estadounidense Chevron, para operar en el país caribeño, que cuenta con las mayores reservas probadas de crudo.
Fuentes: AP, AFP