La asambleísta electa por el movimiento Acción Democrática Nacional (ADN), Annabella Azín, aseguró este lunes, 31 de marzo, que el encuentro del presidente Daniel Noboa con el mandatario estadounidense, Donald Trump, “fue una gran oportunidad, aunque no fue una visita oficial”.
“Pero no importa porque fue una visita para decirle lo que necesitamos, que tenemos esta problemática de seguridad, que necesitamos apoyo”, reiteró Azín en entrevista para W Radio.
El encuentro entre Noboa y Trump, en el contexto de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Ecuador convocada para el próximo 13 de abril, tuvo lugar el sábado en la residencia del gobernante estadounidense en Mar-a-Lago (Florida).
Azín apuntó que “siempre es necesario el apoyo de los presidentes que están haciendo historia y que son líderes nacionales y que pueden, de cierta forma ayudar al Ecuador, como es el presidente Trump”.
Además, recordó que Estados Unidos es uno de los principales socios comerciales de Ecuador.
“Le importa a los Estados Unidos la situación política del Ecuador y ésta fue una gran oportunidad, aunque no fue una visita oficial, fue una visita para decirle lo que necesitamos, que estamos aquí, que tenemos esta problemática de seguridad tan grande, que necesitamos apoyo”, dijo.
La asambleísta electa abundó en que se trata de una problemática transnacional, que compete a todo el mundo pues el narcotráfico y el narcolavado afecta a diversas naciones.
“Entonces es un problema que necesita ayuda transnacional y Daniel fue a pedirle ayuda al presidente Trump, y a conversar sobre el tema de nuestros migrantes (…), que han tenido un trato distinto versus los migrantes de otros países que los han repatriado”, enfatizó Azín sobre los temas tratados en la cita, calificada por la Presidencia como de “carácter amistoso y privado”.
Noboa llegó a la Florida el viernes en la noche y en varias ocasiones ha solicitado públicamente al Gobierno de Trump que incluya en la lista de grupos terroristas a los grupos armados irregulares que operan en su país.
El Ejecutivo estadounidense designó recientemente a seis carteles de narcotraficantes mexicanos y a la banda criminal transnacional Tren de Aragua, nacida en una cárcel venezolana, como terroristas, lo que le permite al Ejército escalar la ofensiva contra estos grupos.