Katalina Barreiro, docente y analista internacional explicó el conflicto reciente en Afganistán. Para Barreiro, “la mayor alarma que se da es que uno de los primeros actos que tienen en Afganistán es la liberación de Israel”. Además, recordó que parte del ser islámico consiste en la Guerra Santa.
Entre los temas más propagados sobre Afganistán en los medios de comunicación, giró en torno a la limitación de los derechos de la mujer. Sobre eso, Barreiro explicó que va a ser complicado que las mujeres puedan tener puestos de autoridad como el de la alcaldesa, por convertirse en un estado fundamentalista.
Así, recordó que hasta 2001 el país exportaba heroína siendo una parte importante de su Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, nunca dejó de exportarlo.
La historia:
La analista remontó la reciente historia de Afganistán al 2001 con el ataque a las Torres Gemelas en Estados Unidos y la presencia del terrorismo de Al-Qaeda. Entonces, EEUU lanza una ofensiva que la llamó una guerra contra el terrorismo y el crimen organizado. Esto, debido a que en Afganistán se encontraba el máximo líder de Al-Qaeda, Osama Bin Laden. Además, la guerra buscó desmontar el fundamentalismo islámico.
En el periodo de 2001 a 2021, EEUU buscó una transición cultural que pasara de una administración fundamentalista y sanguinaria a un gobierno de mayor democracia y ciudadanización como se conoce en occidente. Pero, ello no significó que Afganistán tenga una solidificación sobre esas intenciones. Por el contrario, mantuvo una guerra civil interna y su población no tuvo un respaldo unánime a su presidente.
Hasta 2001, explicó Barreiro, el país exportaba heroína que era parte de su Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, a pesar de la presencia estadounidense, no dejó de exportarlo. Además, es un país rico en minerales como el uranio y el cobre. Así como es rico en petróleo que es controlado por Rusia.