Desde 2010 existe un déficit de $2.500 millones en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Esto para, cubrir los servicios de atención a los niños menores de 18 años, hijos de los afiliados. Así lo alertó Andrés Campaña, especialista en seguridad social quien agregó que “año a año hay un déficit de $257 millones por este concepto. “Como política social es correcta, pero esa nueva prestación no cuenta con ningún financiamiento”, observó.
Dentro de la crisis en la seguridad social, Campaña señaló que para este 2022 solo el IESS requiere de $2.500 millones como contribución del gobierno nacional para su correcto funcionamiento. Sin embargo, en la Proforma para la institución el estado destinará $1.500 millones. Es decir, un valor menor.
Los afectados
De acuerdo con Campaña, el IESS cuenta con 9 millones de afiliados y, por tanto, la institución se convierte en importante debido al manejo de flujo económico.
En esa línea, el experto señaló que los últimos informes actuariales revelan que el pago del 40% de las pensiones que realiza el gobierno es fundamental para garantizar la sostenibilidad. Así, si el gobierno cumpliese con el fondo de invalidez, vejez y muerte, estaría garantizado hasta el año 2037. Además, con los ahorros que se mantengan de $17.000 millones podría darse una garantía hasta el 2047.
Pese a estas recomendaciones internacionales, el analista resaltó que la realidad es otra pues el gobierno no cumple con el pago. “El gobierno nacional tiene algunas obligaciones que la ley reconoce: el 40% de aporte estatal a pensiones, el pago de servicio de salud, la contribución al seguro social campesino y al seguro de desempleo”, explicó.
Sobre el fondo de salud, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacó Campaña, determinó que si el gobierno nacional cumple, estaría garantizado la cobertura hasta 2028. “Sin embargo, el gobierno no cancela desde hace varias décadas”.