Gustavo Chiriboga, jurista experto en derecho penal, criticó la postura del presidente Guillermo Lasso sobre eliminar la tabla de consumo de droga. Así, según el jurista, eliminar la tabla no aporta ni brinda soluciones para eliminar el microtráfico. Por el contrario, señaló que cuando detienen a un microtraficante, lo reemplazan.
Es más, resaltó que el mismo microtraficante es un consumidor y su ausencia no afecta a los grandes narcotraficantes que es donde deben apuntar las autoridades.
Para el abogado, la tabla diferencia lo que es el consumo del microtráfico de drogas. Así, enfatizó que el consumo es un problema de salud pública y no se lo puede criminalizar.
«El estado no da ni quita permiso para que una persona consuma. Es lo mismo con tabaco y alcohol. Cada uno tiene la responsabilidad de saber si es o no sano consumir una sustancia», explicó. Además, puntualizó que la tabla es un insumo que usan de referencia los juzgadores.
Los antecedentes
Chiriboga señaló que previo al Código Orgánico Integral Penal (COIP), existía la llamada Ley 108 que sancionaba cualquier situación relacionada con las drogas. Así, provocó que exista un hacinamiento grave en las cárceles.
Por ese motivo, el gobierno pensó en incluir en el COIP la proporcionalidad de la cantidad de droga que era prohibida portar. Además, el Ejecutivo realizó la llamada tabla de consumo de drogas que, técnicamente, se conoce como el esquema de umbrales sobre la cantidad que las personas pueden tener para su consumo personal. Esto respondía a un pedido de organismos internacionales que marcan como prioritaria la prevención y no la sanción. Ahora, dijo Chiriboga, la eliminación de la tabla provocará que se traslade «un tema de salud, al sector policial».
«Si ahora se piensa eliminar la tabla se camina a la extinta ley de drogas de los años 90», enfatizó el abogado.