Mauricio Pinto, empresario y parte de los Consensos de Cusín que lo celebraron el pasado 23 de octubre, indicó que dentro de los participantes se encontraban personas de distintas líneas ideológicas. Así, citó a Xavier Hervas, de Izquierda Democrática, y Otto Sonnenhozner, exvicepresidente del Gobierno de Lenín Moreno. También, señaló que invitaron a Pabel Muñoz y Marcela Aguiñaga de la línea del correísmo, pero se excusaron a última hora de participar, por lo que el grupo no alcanzó a compensar su inasistencia con alguien de esa línea política.
De otro lado, también indicó la presencia de la presidenta de Comisión de Régimen Económico y miembro de Pachakutik. “Participó los 3 días activamente”, agregó Pinto. Además, indicó que estuvieron personas de centro y de izquierda. “Logramos una participación tan racional”, destacó el empresario y añadió que los involucrados buscaron puntos de acuerdo para llegar a consensos mínimos. “Hoy en día los países necesitan aclarar hacia dónde quieren ir”, señaló.
Sobre los miembros del movimiento indígena, Pinto indicó que invitaron a representantes de Pahakutik y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), pero no asistieron. Quien sí estuvo fue Lourdes Tibán.
Pinto indicó que la cita no será el único ejercicio que realizarán. Así, explicó que en la mira tienen invitar a personas jóvenes a quienes les interesan temas diferentes como el medio ambiente o el extractivismo.
Consensos de Cusín
“El Cusín no es nuevo”, resaltó el empresario. Así, dijo que uno de los objetivos que tuvo la reunión estaba centrado sobre el tema fiscal. Por ejemplo, mencionó que no se puede tener déficit fiscal con endeudamiento que nace a raíz de una descompensación de ingresos y egresos del estado.
“El estado no puede tener una estructura de déficit, financiada a través de endeudamiento. Hay subsidios que no están llegando a la gente que necesita. El 40% en las pensiones al IESS, ese subsidio está llegando al quintil más alto que tiene una permanencia de largo plazo en la seguridad social. El quintil más bajo tiene menos aportes e ingresos. Solo el 38% de la gente que trabaja tiene afiliación”, criticó.