El presidente Daniel Noboa dispuso este martes, 10 de diciembre, el despliegue de más de 2.000 militares y 50 vehículos blindados en El Oro, para reforzar la seguridad en esa provincia, una de las más azotadas por la violencia criminal.
“Nos hemos convertido en la principal amenaza para los criminales, para los pillos también porque no estamos dispuestos a negociar con los narcoterroristas, con los corruptos”, afirmó el mandatario al formalizar la entrega de los 50 vehículos blindados para las fuerzas del orden.
Un comunicado de la Secretaría General de la Presidencia añadió que se masificarán los controles de armas, municiones y explosivos en las ciudades y áreas más concurridas.
Además, el Gobierno precisó que se inspeccionarán las rutas de entrada y salida de los cantones para «impedir que circulen libremente los integrantes de las organizaciones delincuenciales».
Este martes, el gobernante también compartió con jóvenes beneficiarios de becas y sobre la cuestión de la seguridad mencionó que la intensificación de operaciones en otras zonas del país provocó la migración de grupos criminales hacia El Oro.
Esa demarcación es una de las incluidas en el más reciente decreto de estado de excepción que el jefe de Estado prorrogó como parte del «conflicto armado interno», declaratoria aprobada en enero de 2024.