Por primera vez el Observatorio de Estratosférico de Astronomía Infrarroja de la NASA (SOFIA, por sus siglas en inglés) detectó agua en el lado de la Luna iluminado por el Sol.
“Esto indica que el agua podría estar distribuida por toda la superficie lunar, no solo en lugares fríos y en la sombra”, refirió en un comunicado la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio).
SOFIA, dice el texto, detectó moléculas de agua (H2O) en el cráter Clavius, uno de más grandes visibles desde la Tierra, ubicado en el hemisferio sur de la Luna.
Precisa que observaciones anteriores de la superficie de la Luna detectaron alguna forma de hidrógeno.
Sin embargo, no pudieron distinguir entre el agua y su pariente químico cercano, el hidroxilo (OH).
Las mediciones revelan agua en concentraciones de 100 a 412 partes por millón. Eso representa aproximadamente el equivalente a una botella de agua de 12 onzas atrapada en un metro cúbico de suelo esparcido por la superficie lunar.
Los resultados se aparecen en el último número de la publicación científica Nature Astronomy.
“Teníamos indicios de que H2O, la forma familiar del agua que conocemos, podría estar presente en el lado de la Luna iluminado por el Sol”, dijo Paul Hertz.
El científico es el titular de la División de Astrofísica en la Dirección de Misiones Científicas en la Sede de la NASA en Washington
“Este descubrimiento desafía nuestra comprensión de la superficie lunar y plantea preguntas intrigantes sobre recursos relevantes para la exploración del espacio profundo», precisó.
Los resultados de SOFIA se basan en años de investigaciones previas que examinan la presencia de agua en la Luna.
«Cuando los astronautas del Apolo regresaron por primera vez de la Luna en 1969, se creía que nuestro satélite natural estaba completamente seco», precisó la NASA.