Por Pablo Araujo
El 26 de noviembre de 2021, la Organización Mundial de la Salud declara a la variante B.1.1.529 del SarsCov2, como preocupante y la designa con la letra griega ómicron.
La información pública es que ómicron presenta varias mutaciones que podrían afectar a las características del virus, por ejemplo, la facilidad para propagarse o la gravedad de los síntomas que causa.
Tomando como base el alto número de personas que han dado positivo a las pruebas de detección en Sudáfrica, junto con la serie de estudios epidemiológicos que se están haciendo, todo apunta que esta variante podría tener un mayor grado de transmisibilidad que las anteriores.
Las alertas se disparan debido a que las tasas de hospitalización en Sudáfrica van en aumento, ¿esto es causado porque hay más personas que han contraído la infección? ¿o es causado porque se han infectado de ómicron? Cuando dispongamos de mas datos lo sabremos a cabalidad.
Hasta que los estudios se ejecuten y se analicen los datos que se recopilen, no podemos afirmar que los síntomas asociados a ómicron sean muy distintos a los ocasionados por otras variantes. Las pruebas iniciales indican que el riesgo de re-infectarse por esta variante es mayor que con otras variantes preocupantes.
Todas las variantes del SarsCov2 pueden producir síntomas graves y la muerte, sobre todo a las personas más vulnerables, la prevención del contagio es el único camino por seguir.
La clave esta en reducir el riesgo de contraer la Covid19, debes seguir aplicando en tu día a día, medidas de bioseguridad de eficacia demostrada, como son: el uso de una mascarilla bien ajustada, la higiene de las manos, el distanciamiento físico, la buena ventilación de los espacios interiores, evitar los espacios concurridos y la vacunación.
No es el momento para que minimices o elimines las medidas de bioseguridad que reducen la transmisión de este virus.
Mantente a salvo, Mantente saludable y sigue con la ciencia.