La jueza de Garantías Penitenciarias de Pichincha, Soledad Manosalvas, determinó este martes, 30 de mayo de 2023, que al exvicepresidente Jorge Glas le restan por cumplir dos años, once meses y quince días de su pena única de ocho años de cárcel, y desde el 13 de diciembre de 2020 ya tenía vía libre para solicitar la prelibertad.
Con ello, Glas podrá solicitar el cambio de régimen de rehabilitación social al beneficio penitenciario de prelibertad. Esto significa que Glas debería cumplir, fuera de prisión, lo que le queda de la pena, pero cumpliendo ciertas medidas.
Actualmente, el exvicepresidente cumple con “libertad provisional” y otras medidas cautelares. Es decir, se presenta periódicamente ante una autoridad de justicia en la provincia del Guayas y tiene prohibición de salida del país.
Con estas medidas alternativas, al momento, Glas ha permanecido siete meses con 13 días fuera de la cárcel.
En enero de 2023, la jueza penitenciaria de Pichincha, Melissa Muñoz, aceptó el pedido que hizo Glas y dejó como pena única la de ocho años de cárcel. La resolución confirmó que la pena de ocho años de prisión por el delito de cohecho pasivo agravado dentro del caso ‘Sobornos 2012-2016’ absorba a la pena de seis años de prisión por el delito de asociación ilícita, relacionado con la trama de corrupción implantada por la empresa brasileña Odebrecht.