Para el próximo lunes 16 de agosto está prevista la sesión del pleno de la Asamblea Nacional para llevar a cabo el juicio político en contra del excontralor subrogante Pablo Celi. Juan Cristóbal Lloret, el asambleísta interpelante comentó que, de darse la censura, la siguiente acción a tomar consistiría en declarar en emergencia a la Contraloría General del Estado (CGE).
Según el legislador, la CGE fue usada políticamente cuando lo correcto es que sea una institución de carácter técnico. Además, explicó que debe volverse a “refundar” al organismo de control debido a que “hay una red de corrupción a lo interno”. Dentro de esa red, citó incluso a miembros cercanos al expresidente Lenín Moreno. “La Contraloría fue manejada de manera discrecional y corrupto en muchos casos”, reiteró.
De acuerdo a Lloret, el excontralor subrogante continuó en su cargo debido a que “diferentes espacios de poder apoyaron a Celi porque era funcional para usar la Contraloría para perseguir”.
Así mismo, dijo que debe existir una censura de carácter moral, aunque no se dé paso a la destitución, debido a su renuncia previa al cargo. “Pero, durante el juicio, deben sacarse los elementos para nuevas investigaciones de carácter jurisdiccional”, añadió Lloret. “Si no fuera gracias al juicio político, Celi seguiría despachando desde la cárcel”.
El trabajo de la Comisión
De acuerdo a los asambleístas que llevaron adelante el juicio político, el mismo tuvo una sustentación de más de tres horas. En el mismo donde se presentó, pruebas documentales, testimoniales, elementos jurídicos, entre otros que prueban su veracidad. “No todos (los asambleístas) coinciden con todas las causales, pero todos concuerdan con la censura (de Pablo Celi)”, explicó.
Para Lloret, lo ideal consistía en emitir un informe de la Comisión con conclusiones y recomendaciones. Pero, también añadió que los informes sobre la postura de cada legislador fue importante.