Priscila Schettini, esposa del exdefensor del Pueblo, Freddy Carrión, señaló que la esposa del exministro Mauro Falconí no formalizó la denuncia contra Carrión por agresión sexual.
«Solo es de oficio por parte de Fiscalía General del Estado. Por esa razón, observadores internacionales solicitaron ingresar a la audiencia y visitaron en la cárcel a mi esposo, con el fin de analizar el proceso», explicó Schettini.
Presunta trampa
La esposa de Carrión asegura que se trata de una persecución política hecha por funcionarios del Gobierno de Lenín Moreno. «Días antes Freddy solicitó la prohibición de salida del país de ciertas personas», señala.
Schettini ha tomado la vocería en el caso del exdefensor, al igual que el abogado Stalin Raza. Ella relata que el pasado 13 de mayo, el exministro de Salud, Mauro Falconí y su esposa visitaron la oficina de Freddy Carrión Intriago para denunciarle presuntos actos de corrupción sobre las ‘vacunas VIP’, «aprovechando de una relación de amistad de 4 o 5 años», según su explicación.
Ese día no terminaron las conversaciones y al día siguiente, sábado en la mañana, le volvieron a insistir al entonces Defensor del Pueblo. Falconí invitó a Carrión a su casa para continuar con las conversaciones.
Schettini mantiene que, ese 16 de mayo, «desde la llamada telefónica que el señor Falconí hace al exministro de Gobierno Gabriel Martínez, el proceso se contaminó. Es decir, llegaron policías y hubo llamadas a Generales de la Policía y la Comisaría»
Ella añade que los involucrados en los hechos de ese día aseguraron que terceras personas había agredido a Carrión, Falconí y su esposa. «Durante 12 horas, jamás mencionaron que Freddy había abusado sexualmente de la señora. Esa misma noche habrían ingresado al edificio dos personas con cédulas falsas, ellos serían los agresores», explica.
En cuanto al incumplimiento del toque de queda, Schettini cuestiona por qué arrestaron solo a Carrión y no a las otras personas que estuvieron con él esa noche.
Dinero incautado
El día de los hechos, en el departamento de Falconí encontraron más de USD 46.500 y a un funcionario público con procesos abiertos por peculado. «La justicia no hizo nada, los premiaron con testigos protegidos», señala.
Schettini asegura que un familiar de la esposa de Falconí ingresó ese día al departamento a las 10 de la mañana con una mochila negra para tratar de sacar ese dinero. La Policía incautó ese dinero, y cada billete está numerado en el expediente. Se encontró además sietes celulares y tres computadoras, en palabras de Schettini.
