Con préstamos que suman $363.000, una pareja de afiliados al Instituto de Seguridad Social de la Policía Nacional (ISSPOL) y altos mandos de la institución se vieron en la crítica tras conocerse que tuvieron preferencias en préstamos quirografarios.
Según el portal de Pichincha Comunicaciones, el ISSPOL fija en $35.000 el monto límite de los créditos quirografarios, con una tasa de interés anual del 9.15% y un plazo de 8 años. Sin embargo, la general Tannya Varela, jefe de Estado Mayor de la Policía, accedió el 9 de diciembre de 2019 a un préstamo por $193.000, con una tasa de interés anual del 7% y un plazo de 21 años. Además, en la misma fecha, el coronel de la Policía, Edwin Francisco Noguera Cozar, esposo de Varela, accedió a también un crédito quirografario por $170.000, con una tasa de interés del 7% y a 21 años plazo. Ambas deudas de la familia suman $363.000.
De acuerdo a fuentes policiales a las que tuvo acceso Primera Plana, los altos oficiales ejercen influencias para conseguir créditos con mayor agilidad y en condiciones más favorables. “Para el mando policial sí existe dinero para préstamos, sin turno, sin trámites y cuando quieren, fuera de los cupos y cantidades permitidas”, explican. La aprobación de los créditos con beneficios poco usuales, los aprobó Jorge Villarroel, exdirector general del ISSPOL quien renunció el 17 de noviembre de 2020.
Respuesta de las autoridades
Marcia Topon F., directora general encargada del ISSPOL defendió la decisión de su antecesor. En un comunicado remitido a Primera Plana, explica que «el monto de este tipo de préstamo está estrechamente relacionado con la capacidad de endeudamiento del afiliado y avalúo comercial del bien inmueble que queda como garantía en beneficio del Instituto, lo cual asegura su recuperación y minimiza el riesgo».
En este mismo sentido, enfatizó que el ISSPOL cumplió con la legalidad en la concesión de los préstamos.
De su lado, el comandante de la Policía, Patricio Carrillo explicó que el préstamo quirografario de máxima cuantía es «un crédito autorizado y legal», según recoge Diario El Comercio. «No creo que sea un mecanismo de privilegio. No creo que sea un mecanismo discrecional para pocas personas. Es un mecanismo al que accede la mayoría dependiendo del monto, del tiempo, de la capacidad de pago y de muchos otros factores. Yo no quisiera que se mire esto como un mecanismo de privilegio», respondió Carrillo.
Primera Plana intentó conocer la postura de la general Varela, sin embargo, hasta el cierre de esta nota periodística, no obtuvimos respuestas a estos cuestionamientos.