El presidente del movimiento AHORA, Michael Aulestia, negó que sus reparos a la precandidatura del binomio de la alianza Unión por la Esperanza (UNES). Y, de modo particular, a Carlos Rabascall, tenga que ver con una intención de favorecer al líder de CREO y candidato presidencial Guillermo Lasso. “Yo no soy empleado del señor Lasso”.
En entrevista para el noticiero A Primera Hora, de Majestad radio, Aulestia reconoció que en 2017 su organización política respaldó la candidatura de Lasso. Aclaró que AHORA tiene una alianza con el Partido Sociedad Patrótica, en Quito de cara a los comicios de 2021. «Mi objeción no responde a ningún interés político”.
Michael Aulestia
Aulestia explicó que, una vez que quedó ejecutoriada la sentencia del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) a la media noche del miércoles pasado. El jueves presentó la objeción a la precandidatura de Rabascall, argumentando que posee acciones en el banco de Guayaquil, y que esta entidad tiene una filial en Panamá, país considerado paraíso fiscal. “No se trata de cumplir poco o bastante la ley… hemos pedido al Consejo Nacional Electoral (CNE) que incluya como prueba a nuestro favor, el escrito presentado por el Procurador de la alianza UNES cuando impugnó la precandidatura de Guillermo Lasso”.
Añadió: “hemos pedido al Servicio de Rentas Internas (SRI) que certifique qué grupos económicos, como el Banco Guayaquil, tienen relación con paraísos fiscales… el señor Rabascall tendrá que demostrar que el banco es una sociedad de capital abierto”.
Michael Aulestia insistió en que Carlos Rabascall no está habilitado y debe ser descalificado de forma definitiva por el CNE. Incluso, advirtió, la descalificación de Rabascall debe significar la descalificación del binomio de UNES. “El artículo 99 del Código de la Democracia dispone que el binomio es una sola candidatura, mal se haría en descalificar a una sola parte del binomio”.
Aulestia que el CNE, una vez que avoque conocimiento de su objeción, tiene 24 horas para notificar al precandidato impugnado, y de allí, 48 horas para escuchar sus descargos y resolver. La eventual decisión del CNE podrá ser apelada ante el TCE.
