Solo hasta la semana 22, la interrupción del embarazo podrá considerarse un aborto. Después, médicamente, se considera como una cesárea. Así lo informaron el asambleísta por Pachakutik, Ricardo Vanegas, y la activista por los Derechos Humanos, Silvia Buendía. Según la activista, desde ese período el feto ya es viable.
El asambleísta Vanegas alertó que el plazo que debe dictar la ley en casos de abortos por violación son un máximo de cinco semanas. Sin embargo, concordó con Buendía que el feto se considera hasta la semana 22. Así, la activista señaló que los plazos de la ley deben constar en protocolos médicos y dependerán de cada caso.
En esa línea, la activista aclaró que, aunque la ley no establezca plazos, el sector médico sí conoce hasta qué semana puede darse un aborto.
El proyecto de ley
El legislador Vanegas señaló que el informe debe ser devuelto porque no fue construido por los asambleístas y tampoco existió un debate. Además, señaló que varios asambleístas presentaron propuestas de reformas al proyecto, pero la Asamblea no los tomó en cuenta. Así mismo, Buendía agregó que en el informe existen apartados que aún deben construirse pues, “a partir del párrafo 184, la Corte Constitucional, con el dictamen es hacerle el deber (a la Asamblea)”.
“Aún cuando estoy a favor de vida, estoy de acuerdo en la interrupción en caso de violación, pero debe darse un plazo”, enfatizó Vanegas.
Por su parte, Buendía recordó que el artículo 53 habla de la promoción de derechos y de erradicar la violencia. Por ello criticó a exasambleístas y periodistas que están en contra de la ley pero que, dijo, no la han leído.
Vanegas criticó que la Corte Constitucional “no puede decirle a la Asamblea Nacional lo que debe o no hacer”. Así, reiteró que el organismo no puede crear leyes porque esa es una atribución del legislativo. Sin embargo, reconoció que si la vida de la mujer gestante está en peligro en cualquier momento, la función del Estado debe consistir en “proteger la vida que está”.