La lucha interminable de Petita Albarracín finalmente dio resultados este miércoles 9 de diciembre de 2020. Ella buscó justicia ante la muerte de su hija Paola Guzmán Albarracín, quien sufrió de abuso y violencia sexual durante su paso por una institución fiscal que la llevó al suicidio.
Este miércoles, con la presencia del presidente Lenín Moreno, Albarracín recibió la entrega del título de bachillerato póstumo para su hija. La batalla que libró Albarracín logró que el Estado ecuatoriano establezca al 14 de agosto de cada año como el Día Oficial de Lucha contra la Violencia Sexual en las Aulas. Así quedó estipulado en el decreto ejecutivo 1205.
Resolución de la Corte IDH
La acción es parte del acto de reconocimiento de responsabilidad internacional dispuesto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) el pasado 24 de junio de 2020. En esa fecha, la Corte IDH declaró la responsabilidad internacional del Ecuador por la violación de los derechos a la vida, a la integridad personal. A la protección de la honra y de la dignidad, a la educación a las garantías judiciales, a la protección judicial, en perjuicio de Guzmán Albarracín y también de sus familiares. Ecuador recibió la sentencia el pasado 14 de agosto de 2020.
Los sucesos
En 2001, Paola Guzmán, de 14 años, fue violentada sexualmente por el vicerrector del colegio al que asistía. La niña vivió en esta situación de violencia durante un año. En 2002, ingirió unas pastillas que contenían fósforo blanco y, luego de ser trasladada a una casa de salud, murió.
El 6 de febrero de 2003 se ordenó la detención del agresor y más adelante, el 2 de septiembre de 2005, se le imputó el delito de estupro agravado. El implicado fugó y años más tarde, en 2008, la justicia ecuatoriana declaró prescrita la acción penal.
Después de 18 años de la muerte de Paola, el presidente Moreno reconoció la responsabilidad del Estado ecuatoriano. «A nombre del Estado ecuatoriano les pido que acepten nuestras disculpas por ese inmenso dolor», manifestó el Presidente de la República, quien reconoció que el sistema educativo, el sistema de salud y el sistema judicial no funcionaron, «el país no funcionó, y debemos avergonzarnos».
Según el Mandatario, en los últimos años hubo 11.000 denuncias de este tipo. Ello se traduce en 1.900 por año «y lo peor es que muchos agresores continúan dando clases en otras escuelas y otros colegios», alertó Moreno.