El presidente Guillermo Lasso declaró área reservada militar de defensa a los cerros de Montecristi y San Isidro, en la provincia de Manabí.
La declaratoria se da tras las protestas de los pobladores de las zonas, que se oponen a la colocación de radares por parte de la Fuerza Aérea Ecuatoriana.
Según el decreto presidencial, en dicha área regirán medidas de seguridad del tipo y alcance que sea necesario para proteger la soberanía e integridad territorial.
El documento también establece que se colocará un radar como mecanismo para identificar y neutralizar aeronaves de dudosa procedencia.
El Gobierno nacional considera que estas aeronaves podrían estar involucradas en actos ilícitos relacionados con el narcotráfico e inciden en el aumento de la violencia en el país.
El régimen aseguró que este proyecto ya cuenta con el registro ambiental, aprobado por el Ministerio del Ambiente, para precautelar el ecosistema.