Un equipo de científicos advirtió esta semana que más del 70 por ciento de los signos vitales de la Tierra se encuentran en estado crítico debido al cambio climático.
El estudio, publicado en la revista científica BioScience, alertó que “estamos al borde de un desastre climático irreversible”.
La investigación detalló que gran parte de la estructura misma de la vida en la Tierra está en peligro y explicó que “vendrán condiciones climáticas mucho más extremas en los próximos años”.
De acuerdo con los expertos, las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero causadas por el hombre son los principales impulsores del cambio climático.
“Como científicos y académicos, sentimos que es nuestro deber moral y el de nuestras instituciones alertar a la humanidad sobre las crecientes amenazas que enfrentamos de la manera más clara posible y mostrar liderazgo para abordarlas”, reiteraron.
De los 35 signos vitales planetarios rastreados anualmente, 25 se encuentran en niveles récord, advirtieron.
En el estudio, los científicos mostraron algunas variables que han cambiado o se encuentran en extremos récord entre ellas:
La actividad humana
En este aspecto, los expertos mostraron cómo el tamaño colectivo y los patrones de consumo de la humanidad continuaron acelerándose en múltiples frentes. Aunque las tasas de fertilidad cayeron ligeramente a un mínimo histórico en 2023, otras variables establecieron máximos históricos, incluida la población humana, la población de ganado rumiante, la producción de carne per cápita y el producto interno bruto.
Energía
Aquí los científicos especificaron que el consumo de combustibles fósiles aumentó un 1,5 por ciento en 2023 en relación con 2022, principalmente debido a aumentos sustanciales en el consumo de carbón y petróleo. El uso de energía renovable también creció en 2023, y el consumo de energía solar y eólica en conjunto aumentó un 15 por ciento en relación con 2022.
Bosques
Asimismo, el estudio alertó sobre la pérdida mundial de cobertura arbórea, la cual aumentó de 22,8 megahectáreas (Mha) por año. Esto se debió, al menos en parte, a los incendios forestales, que provocaron que la pérdida de cubierta arbórea alcanzara un récord de 11,9 Mha. “Las altas tasas de pérdida de cubierta arbórea pueden generar una serie de ciclos de retroalimentación relacionados, en los que la pérdida de secuestro de carbono forestal conduce a un calentamiento adicional, lo que puede generar mayores pérdidas en el secuestro de carbono”. Este tipo de proceso de retroalimentación climática del carbono podría limitar el éxito de algunas soluciones climáticas naturales, alertaron.
Gases de efecto invernadero y temperatura globales
Las emisiones anuales relacionadas con la energía aumentaron un 2,1 por ciento en 2023 y ahora superan las 40 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente por primera vez, señaló la investigación. Los tres principales países emisores son China, Estados Unidos e India, que, en conjunto, representan más de la mitad de las emisiones globales. Recientemente se observó que los niveles de dióxido de carbono estaban aumentando.
Océanos y hielo
La acidez y el contenido de calor de los océanos se encuentran en extremos récord, lo que ha provocado diversos impactos climáticos relacionados con los océanos. Por ejemplo, las olas de calor de 2021 y 2023 provocaron episodios de mortalidad masiva de animales marinos. Además, el nivel medio global del mar se encuentra actualmente en un nivel récord, principalmente debido al calentamiento general.
Los científicos advirtieron sobre el riesgo de colapso social y consideraron que la emergencia climática no es un tema aislado.
“El calentamiento global, aunque es catastrófico, es simplemente un aspecto de una profunda policrisis que incluye degradación ambiental, creciente desigualdad económica y pérdida de biodiversidad”.