La bióloga molecular Damaris Intriago, entrevistada en el noticiero A Primera Hora, de Majestad radio, aseguró que el hallazgo de la nueva variante de la Covid-19, descubierta en el Reino Unido y sobre la que en el Ecuador se detectaron los primeros cuatro casos, no afectaría la eficacia de las vacunas que han comenzado a ser administradas alrededor del mundo.
La especialista explicó que no se trata de una nueva cepa (técnicamente un nuevo virus), sino de una variante viral. Esta está relacionada con los procesos de replicación que ha adquirido el virus, la cual, si bien es cierto es más contagiosa y tiene índices más altos de transmisibilidad, no es más letal. De todas formas, dijo, la ciencia avanza en las investigaciones al respecto. Aún así, reveló que esta clase de coronavirus no ha cambiado tan rápidamente, como otros virus. Así, citó a la influenza, pero admitió que la variante detectada es el resultado de 17 cambios en un tiempo relativamente corto. “Quizá hubo un paciente al que la enfermedad se le hizo crónica y mantuvo el virus en su organismo por mucho tiempo, replicando y cambiando”, explicó.
Sobre las dosis
Añadió que las vacunas aprobadas de Pfizer, AstraZeneca y Moderna están en fase tres y, en todos los casos, requieren dos dosis para garantizar la inmunización. “La segunda dosis debe ser aplicada 21 días después de la primera, para generar una inmunización mucho más robusta”. Empero, advirtió que, dependiendo del paciente, las vacunas sí podrían generar afectos adversos leves.
Se mostró preocupado por el manejo en el Ecuador del vacuna de Pfizer, cuyas primeras 50.000 dosis llegarán al país el 18 de enero, según anunció el gobierno, y sobre las que, dijo la especialista, no hay claridad en cuanto a la preservación de la cadena de frío, necesaria para garantizar su eficacia. «Lo del hielo seco es muy controversial. Termina siendo dióxido de carbono y hay que tener cuidado con su preservación”, resaltó.