Estados Unidos y Rusia votaron juntos este lunes, 24 de febrero, en contra de una resolución de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que condena la guerra en Ucrania.
El voto en contra de la resolución respaldada por Ucrania y Europa mostró que Estados Unidos estaba en desacuerdo con sus aliados europeos de larga data y, en cambio, se alineó con Moscú.
Se produjo mientras la administración Trump ha buscado conversaciones con Moscú sobre el fin de la guerra, mientras que el presidente Donald Trump ha aumentado su retórica hacia el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.
La resolución fue adoptada por la Asamblea General con 93 votos a favor.
El texto señala “con preocupación que la invasión a gran escala de Ucrania por parte de la Federación Rusa ha persistido durante tres años y continúa teniendo consecuencias devastadoras y duraderas no solo para Ucrania, sino también para otras regiones y la estabilidad global” y “llama a una desescalada, un cese temprano de las hostilidades y una resolución pacífica de la guerra contra Ucrania”.
Estados Unidos había presentado una resolución rival en la Asamblea General, que no calificaba a Rusia de agresor ni reconocía la integridad territorial de Ucrania.
Antes de la votación en la Asamblea General, la embajadora Dorothy Shea, encargada de negocios de la Misión de Estados Unidos ante la ONU, había instado a “todos los Estados miembros, incluidos Ucrania y Rusia” a respaldar la resolución.
“Una declaración simple e histórica de la Asamblea General que mira hacia adelante, no hacia atrás. Una resolución centrada en una idea simple: poner fin a la guerra. Es posible un camino hacia la paz”, dijo.
Estados Unidos terminó absteniéndose en la votación de su propia resolución en la Asamblea General después de que se aprobaran varias enmiendas antes de la votación para reforzar el lenguaje contra Rusia y reafirmar la integridad territorial de Ucrania.
Fuentes: CNN, EFE