El fiscal de la provincia de Orellana, Luis González, ratificó el dictamen abstentivo en contra de los seis militares acusados en el caso de la subteniente Pamela Ati y con esa decisión quedaron libres del proceso penal.
La Fiscalía dejó cerrada la investigación y declaró que la muerte de Ati fue accidental, por intoxicación alcohólica, pese a la existencia de un informe inicial que hablaba de femicidio.
La subteniente Aidita Ati fue hallada sin vida la madrugada del pasado 29 de junio en su dormitorio en el Fuerte Militar Napo.
La autopsia preliminar determinaba que su muerte había sido por asfixia mecánica y que incluso fue agredida sexualmente.
No obstante, se realizó una exhumación y en ese examen se determinó que la muerte de Ati fue por un edema pulmonar agudo, de forma accidental. Tampoco se encontró ADN de los militares en el cuerpo de la subteniente, según la investigación.
El pasado 5 de julio, la Comisión de Seguridad Integral de la Asamblea Nacional (parlamento) de Ecuador se sumó a las investigaciones de posible femicidio de la subteniente Ati.
Representantes del Ministerio de Defensa, del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y de la Brigada de Selva Napo, donde se produjo el deceso de Ati, acudieron a la sesión de la mesa legislativa.
El titular de Defensa, Gian Carlo Loffredo, no estuvo presente, pero envió una carta en la cual pidió a los asambleístas declarar la sesión reservada para no interferir en la investigación penal que lleva adelante la Fiscalía.
El caso ha causado indignación en el país, pues sería el segundo femicidio en una institución de seguridad del Estado en los últimos dos años, luego de que en septiembre de 2022 fuera asesinada María Belén Bernal dentro de la Escuela Superior de Policía.
Del 1 de enero al 31 de diciembre de 2023 se registraron en Ecuador 321 femicidios, según datos de la Fundación Aldea, Asociación Latinoamericana para el Desarrollo Alternativo.