La Fiscalía General del Estado inició, de oficio, una investigación previa “por terrorismo” tras la explosión de dos vehículos este jueves, 13 de marzo, en las inmediaciones de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, la cárcel más grande y poblada del país, cuya infraestructura también resultó afectada.
Según la Fiscalía, la explosión dejó una persona fallecida y otras dos heridas.
La explosión ocurrió a la 1:38 hora local (6:38 GMT) en un conjunto de vehículos, según detalló el Municipio de Guayaquil en un comunicado, si bien hasta el momento ninguna autoridad ha confirmado que se trate de un atentado con coche bomba.
Sobre el caso, el director nacional antidrogas de la Policía, Holguer Cortez, dijo presumir que se trató de “una reacción de los grupos” de delincuentes ante el anuncio del presidente Daniel Noboa, de que estableció una “alianza estratégica” con el empresario y exmilitar Erik Prince, fundador de la empresa de seguridad privada Blackwater, para luchar contra el “narcoterrorismo” y el crimen organizado.
Cortez indicó que continúan las investigaciones para establecer las motivaciones del suceso, mientras Noboa atribuye los hechos violentos a intentos por desprestigiar las acciones de su Gobierno contra la delincuencia de cara a la elección presidencial de segunda vuelta, prevista para el 13 de abril, en la que se medirá con la candidata correísta, Luisa González.
La persona que falleció en la explosión es un guardia carcelario de la prisión, quien fue alcanzado por las esquirlas de la deflagración, mientras que entre los heridos también se encuentra un policía. Las llamas producto de la explosión dejaron dos vehículos incendiados en su totalidad y también alcanzaron a otros cuatro vehículos que se encontraban a poca distancia.
Asimismo, las viviendas aledañas sufrieron daños a causa de la onda expansiva, cuyos vecinos quedaron alarmados y registraron las llamas en sus teléfonos celulares para luego publicarlas en las redes sociales.