Tras la publicación de la encuestadora Perfiles de Opinión que explica que el 75,37% de los ciudadanos califica como mala o muy mala la gestión de la Asamblea Nacional. Libia Rivas, presidenta del Instituto de Estudios Legislativos, y Marcelo Espinel, vocero observatorio legislativo, alertaron que el Legislativo no logra sintonizar con las expectativas que la ciudadanía tenía al momento de la elección.
En esa línea, Espinel agregó que las encuestadoras revelan que la ciudadanía sigue desconfiando de la institucionalidad de la Asamblea.
Rivas recordó que en 2019 el Legislativo reformó el Código de la Democracia para mejorar la representatividad en el Parlamento. “Pasamos de una elección entre listas a elegir por una sola lista”, indicó. Sin embargo, para Rivas, en los siete meses de la nueva gestión, se evidencian “supuestos que han debilitado la imagen y la institucionalidad”, enfatizó.
Rivas dijo que entre los primeros puntos se encuentran las denuncias contra asambleístas. Así, dijo que esto devino en la pérdida del puesto de la legisladora Bella Jiménez. También, señaló que hay una conflictividad alta con el Ejecutivo. Así mismo, en el ámbito legislativo, “no han sabido desempeñarlo de la mejor manera”. Por ejemplo, señaló a la última reforma económica que entró por el ministerio de la ley y no existieron acuerdos en la Asamblea.
Ejecutivo y Legislativo
Para Espinel, el Parlamento evidenció la incapacidad de generar consensos no solo con otras funciones del Estado, sino también a la interna de la misma Asamblea. Así, dijo que esto responde a la alta disparidad y diversidad ideológica, a lo interno; y a la discrepancia ideológica entre el Ejecutivo y Legislativo. Sobre esto último, recordó que más de 100 legisladores se identifican con la tendencia de izquierda y centro izquierda, mientras se encuentran en un gobierno de derecha como el que corresponde al actual de Guillermo Lasso.