El director de proyectos de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo, Marcelo Espinel, presentó un balance sobre el trabajo de la Asamblea Nacional, al finalizar el 2020 y a solo 5 meses que termine el actual período legislativo.
Durante este año, el Parlamento aprobó 20 leyes, de las cuales 19 corresponden al contexto de la pandemia del Covid-19. Las mismas, fueron debatidas de forma telemática, convirtiéndose en la primera legislatura de la región en trabajar de esta forma, por encima de Argentina y Colombia, que tardaron varios meses en activar sus sesiones virtuales.
En lo que va del período legislativo, desde el 14 de mayo de 2017 a diciembre de 2020, la Asamblea aprobó 62 leyes. “Cuantitativamente este número es similar al de los períodos 2009-2013 y 2013-2017”. Sin embargo, Espinel criticó lo que denominó como “hiperinflación legislativa”. Es decir, la presentación masiva de proyectos de ley.
Hasta este momento, en la Asamblea se han presentado 891 proyectos de ley, casi tres veces más que los dos períodos anteriores. “La mayoría de los proyectos presentados por los asambleístas no tiene más de 10 artículos. El 70% son reformas a leyes aprobadas en el período anterior. Lo que se me viene a la mente es si se realizó un estudio adecuado en torno a la necesidad de reformas dichas leyes”, resaltó.
Proyectos de ley por bloque
El analista sugirió que se analice la posibilidad de impulsar reformas para que la presentación de proyectos de ley sea por bloque y no de modo individual. Así, dijo que podría evitarse “que al final del año los asambleístas quieran decir que fueron los que más proyectos presentaron”. Además, que se incremente el número de integrantes de la Unidad de Técnica Legislativa, que se convierte en el primer filtro de un proyecto de ley, antes de su calificación en el Consejo de Administración Legislativa (CAL).
En cuanto a Fiscalización, Marcelo Espinel refirió que, en lo que, del actual período, la Asamblea llevó adelante 33 procesos de juicio político, de los cuales seis terminaron en censura y destitución. Otros ocho fueron tratados por la Comisión de Fiscalización. Además, seis desembocaron en censura, pero ya no en destitución, porque los funcionarios ya habían dejado el cargo; entre otras cifras.
