Durante un operativo, la Policía Nacional ingresó a varios locales mayoristas del Centro Histórico de Quito y decomisó alrededor de 30 bultos con cajas de mascarillas que tenían la fecha de caducidad vencida.
De acuerdo con un reporte del canal Ecuavisa, las denuncias de sobreprecios de hasta un 500 % en el valor de la caja de las mascarillas, obligó a las autoridades a ingresar al sector comercial de El Tejar, para ejecutar los controles.
Hasta el pasado viernes, las mascarillas se vendían en 0,90 pero el martes, 6 de mayo, el precio llegó a hasta 15 dólares la caja de 50.
La orden es desplegar los operativos de control con las 13 comisarías de Pichincha.
Las autoridades solicitaron a la ciudadanía denunciar los sobreprecios y ayudar en la lucha contra la especulación.
Arcsa verifica calidad de mascarillas

Como parte de los operativos interinstitucionales ejecutados a escala nacional, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) realiza el acompañamiento técnico a las Intendencias de Policía, entidades responsables del control de precios de productos, para verificar la calidad y legalidad sanitaria de las mascarillas comercializadas en farmacias, distribuidoras, centros de abasto y otros establecimientos.
Ante el incremento de la demanda de estos insumos por recientes alertas sanitarias, Arcsa actúa en coordinación con el Servicio de Rentas Internas (SRI) y el Ministerio de Gobierno, realizando inspecciones que garanticen que los productos cumplan con los requisitos sanitarios establecidos por la normativa ecuatoriana.
Arcsa detalló en un comunicado que, durante los operativos, el equipo técnico de la Agencia realiza una “minuciosa revisión” para comprobar que las mascarillas cuenten con registro sanitario vigente, lo cual garantiza su legalidad y trazabilidad.
Asimismo, se verifica que estos productos estén adecuadamente almacenados, es decir, en condiciones que aseguren su integridad y eviten la contaminación o deterioro.
Finalmente, se evalúa que se trate de mascarillas seguras, efectivas y de calidad, que realmente cumplan su función como barrera de protección personal frente a agentes infecciosos.
Estas acciones se realizan como un apoyo a los operativos liderados por las Intendencias de Policía, responsables de controlar la especulación de precios y el comercio informal, en un esfuerzo conjunto en el que interviene también el SRI, que se encarga de verificar el cumplimiento de obligaciones tributarias y la emisión de comprobantes de venta.
Arcsa cumple un rol técnico dentro de estos operativos para garantizar que las mascarillas ofertadas al público cumplan con los requisitos sanitarios establecidos en la ley.
La Agencia recuerda a los ciudadanos la importancia de adquirir mascarillas en establecimientos autorizados y verificar que cuenten con registro sanitario vigente.