Este miércoles se conoció que maquinaria pesada y dos volquetas ingresaron a la Penitenciaría para derrumbar algunas paredes que servían de escondite para los presos.
Según el director del SNAI, Fausto Cobo, está controlado el corredor de la muerte, un pasillo que se encuentra en el centro de la penitenciaría.
“Tenemos el control de la parte externa, del perímetro interno y de la parte superior. Esta controlado por militares y policías y habrá que tomar medidas de infraestructura”, dijo.
La maquinaria destruyó la maleza en la que se guardaba las armas y desde el lunes los policías y militares están sobre los techos y pasillos. Sin embargo, desde afuera se evidencia cómo continúan las garitas construidas por los reos para atacar a quienes se encuentran en otros pabellones y a los mismos guías.
