Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, pidió respetar la dignidad de los migrantes y refugiados, tras la deportación por Estados Unidos de indocumentados esposados y encadenados.
«La dignidad de los migrantes, refugiados y de quienes buscan asilo debe ser respetada, sus derechos deben ser respetados. Esto también reconociendo que cada país tiene derecho a controlar sus fronteras y fijar sus políticas, pero hay estándares que deben respetarse», enfatizó a la prensa.
El Ministerio brasileño de Relaciones Exteriores informó que pedirá explicaciones al gobierno de Estados Unidos por lo que llamó «tratamiento degradante» de 88 ciudadanos deportados el pasado viernes.
El avión estadounidense aterrizó en el aeropuerto de Manaos, en Amazonas, y la Policía Federal advirtió que los pasajeros habían sido transportados esposados y encadenados.
«El Gobierno brasileño considera inaceptable que no se respeten las condiciones acordadas con el Gobierno estadounidense.
Brasil acordó realizar vuelos de repatriación, a partir de 2018, para acortar el tiempo que estos nacionales pasan en los centros de detención estadounidenses, debido a la inmigración irregular y sin posibilidad de apelación», señala en un comunicado.
El vuelo tenía como destino el aeropuerto internacional de Belo Horizonte, pero tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en Manaos debido a problemas técnicos.
Las autoridades brasileñas no autorizaron la continuación del vuelo fletado a Belo Horizonte el viernes por la noche debido al uso de esposas y cadenas, al mal estado de la aeronave, con el sistema de aire acondicionado averiado, entre otros problemas, y a la revuelta de los 88 nacionales a bordo ante el tratamiento indigno recibido, añade la nota del Ministerio.
Asimismo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, desautorizó el ingreso al país de aviones militares con ciudadanos deportados desde Estados Unidos, para los cuales exigió un trato digno.
Tras esto, Donald Trump amenazó con un alza de 25 por ciento a las exportaciones colombianas a Estados Unidos, añadió que se elevaría a 50 por ciento en una semana y que era “el inicio”.
La crisis se superó en el transcurso de este domingo y la Cancillería colombiana informó que el canciller Luis Gilberto Murillo y el embajador Daniel García-Peña viajarán en las próximas horas a Washington para sostener reuniones de alto nivel que den seguimiento a los acuerdos migratorios.
La Casa Blanca también informó que Colombia aceptó recibir a sus connacionales, no obstante, la nación sudamericana aclaró que el acuerdo incluye aceptarlos en condiciones dignas y puso a disposición el avión presidencial para el vuelo de quienes debían ser trasladados el domingo.
La mayor promesa de la campaña que llevó a Trump nuevamente a la Casa Blanca fue llevar a cabo la mayor expulsión de extranjeros de la historia.
Según datos oficiales, hay 11 millones de indocumentados en Estados Unidos.
Fuente: ONU Noticias, PL, AFP
