En medio de los temores de la humanidad, finalmente cayó el cohete chino Gran Marcha-5B Y2 pero ya desintegrado. Así lo informó la Agencia de Vuelos Espaciales Tripulados de ese país.
La fuente precisó que la desintegración del aparato tuvo lugar el ingresar a la atmósfera y que los restantes escombros cayeron en el mar.
Exactamente su caída se registró en los 2,65 grados de latitud norte y los 72,47 grados de longitud este, en el océano Índico, cerca de las Maldivas.
El cohete había sido lanzado al espacio el 29 de abril de este año para transportar el módulo central de la estación espacial que China prevé construir desde este año. Esta deberá entrar en funcionamiento en 2023.
La agencia espacial china señaló que había poco peligro de que dicho cohete causara afectación pero Estados Unidos dijo que ese acto fue una imprudencia.