«Cuando empezó el gobierno de Lenín Moreno le aconsejamos que se dedique a solucionar los problemas de la gente y se olvide de perseguir a Rafael Correa. Hizo lo contrario», con esta frase el consultor y asesor político Jaime Durán Barba analizó la realidad actual latinoamericana y la popularidad de Correa en la contienda electoral actual.
Lo hizo en el portal periodístico Perfil. Su análisis se concentra en los avances sociales, los retos actuales y hace un breve análisis sobre los líderes latinoamericanos.
En el caso ecuatoriano, explica que la recomendación que entregó personalmente al presidente Lenín Moreno fue gobernar por los ciudadanos sin dejarse interrumpir por lo político. Moreno desestimó la recomendación y empezó la persecución contra Correa. El resultado: «Sacó a Correa de la competencia electoral, pero (Lenín Moreno) tiene la peor imagen presidencial del continente», criticó.
Esto produjo que quien lidere las encuestas de intención del voto sea Andrés Arauz, «el candidato de Correa», sentenció Durán Barba. Así, según sus estadísticas, le sigue Yaku Pérez, el presidenciable de Pachakutik, brazo político del movimiento indígena. En tercer lugar está Guillermo Lasso «en un mal tiempo para ser candidato y banquero».
Pero además, pronosticó que de los 14 candidatos restantes, alguno podría tomar fuerza. Esto en concordancia con el desánimo político que existen en el 90% de los ecuatorianos.
El resto de Latinoamérica
Durán Barba también se refirió a Argentina y Bolivia. «Ser perseguido siempre dio buenos réditos políticos», escribió y empezó a hablar sobre los políticos perseguidos del continente. Así explicó que en el caso argentino, «si Mauricio Macri hubiese perseguido a Cristina, ella habría ganado en una sola vuelta sin ayuda de nadie».
La persecución también la relató dentro del caso boliviano. En él, explicó que la actual presidenta de facto Jeanine Áñez creyó ser popular pero al postularse a la Presidencia, tuvo un fracaso estrepitoso.