Por Esteban Ron Castro
Después de lo acontecido en la madrugada de ayer, 03 de junio de 2021, en un proceso nunca visto dentro del Concejo Metropolitano de Quito, la remoción de un alcalde se produjo en virtud del temple, argumentación y vehemencia de dos personas que desde un inicio demostraron su coherencia y sentido lógico argumentativo para justificar la actividad e inactividad de la autoridad frente a pandemia y otros postulados por la ciudad.
Todo esto, contrario al lamentable papel que el primer proponente de la remoción tuvo en horas de la mañana del 02 de junio de 2021, en la que a través de elucubraciones, tonos burlones y hasta coloquialismos insulsos no se logró sostener una tesis, y él mismo decidió “desistir” del proceso de remoción del alcalde, porque supuestamente se habría ya configurado una mayoría a favor del alcalde; quedará del fuero interno de la persona analizar lo acontecido, y lo dicho por los concejales en la sesión creo que ha sido un escarnio para el señor en mención, no perdamos teclas en esto.
Lo cierto es que, con una votación ajustada, la remoción del alcalde se materializó; nuevamente, mucho se dirá de la argumentación del abogado del alcalde, quien efectivamente cumple un rol de defensa y asume una postura específica, esto es parte de un proceso como el que se vivió, y el mismo tiene derecho a presentar una teoría del caso, robustecerla y exponerla, finalmente para eso estamos los abogados, siempre que no transgredamos el propio sistema jurídico o utilicemos prácticas al margen de la ley e incluso la moral; nuevamente y gracias a la UIDE, prefiero las teclas y la academia.
Existió un papel que fue aplaudido por las y los quiteños; los concejales asumieron finalmente una postura no endeble ante una situación que estaba siendo discutida en la ciudad desde hace más de un año, aclaro que algunos de estos, desde inicio, colaboraron con el proceso y lo analizaron sesudamente y con sus aportes en la Comisión de Mesa; créanme que spiderman estará orgulloso de quienes al fin asumieron dicha postura; sin embargo, qué aplaudir, poco, me parece que es el deber ser de las autoridades. Me quedo siempre con los argumentos de las proponentes de la remoción y su exposición que a decir de los propios concejales fue lo fundamental para la votación, vaya preparación.
Ahora pasemos al futuro o las posibilidades de Jorge Homero Yunda Machado, o como fue llamado en la sesión por la Secretaria del Concejo “Homero J.” Yunda, cuando los Simpsons se le cruzaron por la cabeza. Pequeño párrafo para llamar su atención.
El Cootad desde un inicio consagró la figura de la consulta ante el Tribunal Contencioso Electoral respecto de los procesos de remoción dentro de los GADs, las justificaciones del momento fueron la falta de prolijidad en el manejo procedimental que podrían producirse en el eventual uso de la institución de la remoción. Lo cierto es que, con las reformas al Código de la Democracia de 2020 se dio consonancia a la figura y es plenamente aplicable.
Una vez que Jorge Yunda sea notificado por parte de la Secretaría del Concejo Metropolitano, este tendrá el término de 3 días para presentar el pedido de Consulta ante el TCE, el mismo que deberá cumplir con algunos requisitos y formalidades desde inicio y evidenciar si el Concejo, Comisión y hasta propuesta adoleció de alguna vulneración procedimental y no se tomaron un cuenta formalidades. En este caso deberá existir la prolijidad adecuada para dicha presentación, ya que cualquiera de los jueces del organismo pueden enviarlo a completar y no sería conveniente una reunión estilo: Pérez Guartambel – Seraquive – Picq – Torres.
Después de la presentación de la consulta se dará un sorteo entre los 5 jueces del TCE y tendremos a un sustanciador, con esto la Secretaría del Concejo tendrá el término de 2 días para remitir ese gran expediente de remoción foliado y sacramentado; y este debe ser verificado en el TCE, esto puede tomar algún tiempo; tiempos no contemplados legalmente que pueden retrasar el proceso de actuaciones en el TCE; recordemos cuando Yaku Pérez presentó su último recurso el TCE, este demoró 6 días solo en hacer folio del expediente y con todo su personal a dedicado a la tarea. Vaya que Yaku ha puesto en jaque el TCE en los últimos tiempos.
Volvamos, digamos que los requisitos son adecuados y el expediente esté listo; se avocará conocimiento y el TCE deberá tomar una decisión en el término de 10 días. El pronunciamiento puede tomar dos vías: la primera, se ratifiquen las actuaciones del Concejo y Comisión, con lo que la remoción del, hasta ahora, Alcalde se ratificaría y se procedería con la notificación al GAD para que Jorge Yunda se retire del cabildo. La segunda, que existan errores o vicios procedimentales o formales, el TCE deberá identificarlos, señalarlos y devolver el expediente al Concejo Metropolitano, pero Jorge Yunda permanecerá en el cargo.
En el eventual caso en el que el Alcalde presente esta consulta, todo el proceso de remoción en el Concejo se suspende y Jorge Yunda sigue siendo el acalde, esto puede tomar aproximadamente un mes.
Con esta resolución, existe una nueva posibilidad de defensa, esto es una acción extraordinaria de protección sobre el pronunciamiento del TCE, si este no le es favorable. Jorge Yunda podría accionarla pero esto no suspende la ejecución de la remoción y debería entrar a la pelea sin su calidad de alcalde. Posiblemente los colegas dirán, pero si no es una sentencia, como cabe una acción extraordinaria de protección; pregunta válida, pero la propia Corte Constitucional ya ha admitido a trámite AEPs en contra de este tipo de resoluciones.
Hasta que los escenarios se configuren, aún queda algo de tiempo de discusión; mientras tanto unas frases sobre lo aprendido.
- El uso y abuso de las instituciones jurídicas de control político debe ser plenamente justificado y técnico. Su utilización inadecuada las desnaturaliza y hará que se pierda confianza en las mismas; ya pasó con el juicio político en el legislativo.
- La tecnicidad debe sobrepasar el cálculo político, muy bien Jéssica Jaramillo.
- El protagonismo político y de opinión pública se construye y no se aprovecha de las personas o de causas peleadas por otras personas. No se suban a las camionetas de personas que la han peleado, salvo que estas los inviten.
Ayer, en horas de la noche, Jéssica Jaramillo ha anunciado que fue notificada con la resolución de remoción, por lo general, todas las notificaciones salen al mismo tiempo, por lo que Jorge Yunda tendrá hasta el martes 08 de junio para la presentación de la Consulta ante el TCE