El presidente de la Federación Nacional de Transporte Pesado, Luis Felipe Vizcaíno, advirtió que el sector que representa está al borde de la quiebra, debido a la crisis económica que ya venía enfrentando antes de la pandemia, los efectos de la emergencia sanitaria, y el aumento del precio del diésel.
En diálogo con el informativo A Primera Hora, de Majestad radio, Vizcaíno señaló que en los últimos tres meses el precio del diésel se ha incrementado en un 15 por ciento, afectando duramente la estructura de costos del transporte pesado: “el diésel es el combustible más sensible desde el punto de vista social… se movilizan alimentos, gas, combustibles, pasajeros… la situación es muy complicado y estamos al borde de la quiebra”, aseguró el dirigente gremial.
Luis Felipe Vizcaíno
Señaló que no existe una explicación lógica para que el precio del galón de diésel haya pasado de USD 1,037 a USD 1,15, pues, añadió, el gobierno había anunciado la aplicación de un sistema de bandas que iba a estar atado al comportamiento del precio internacional del petróleo: “el crudo no ha subido más allá de 5 por ciento, pero el diésel se ha incrementado 15 por ciento”.
Criticó que el gobierno no haya cumplido con las compensaciones ofrecidas al sector del transporte pesado: “en Ecuador, una llanta cuesta USD 500; el Perú, USD 200; y en China USD 100… en Ecuador, un camión cuesta USD 100 mil, mientras en Perú el mismo camión cuesta USD 60 mil”.
Vizcaíno afirmó que los fletes han bajado, y que la alternativa de subir sus costos no es viable, porque sería un golpe a la economía de los ecuatorianos.
Sostuvo que de la flota de 250 mil camiones que se movilizan en todo el país, 60 mil están parados, que el sector ha perdido 30 mil empleos, y que los volúmenes de carga se han reducido en un 40 por ciento.