Los primeros $2.000 millones del préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) para Ecuador, irán al pago de las obligaciones atrasadas que tiene el Estado con varios sectores. Así lo informó en cadena nacional el presidente Lenín Moreno la noche del domingo 4 de octubre de 2020.
Los $2.000 millones son parte del acuerdo alcanzado entre el FMI y Ecuador. El Gobierno de Lenín Moreno destinará ese monto al pago de obligaciones atrasadas con proveedores, juntas parroquiales, municipalidades y gobiernos provinciales. Pero también al pago de liquidaciones a trabajadores de empresas suprimidas, devolución de Impuesto al Valor Agregado (IVA) a personas de la tercera edad y créditos del programa “Reactivate Ecuador”. Los acuerdos incluyen créditos por $6.500 millones en tres años.
Durante su intervención, Moreno presentó cinco metas, en las que, dijo, trabajará su gobierno hasta el final del mandato para asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas. Esas son: alcanzar superávit global del sector público no financiero del 0,6% en el 2022; alcanzar un nivel de deuda sobre el Producto Interno Bruto menor al 57% hasta el 2025; mejorar la transparencia en las auditorías del Banco Central del Ecuador (BCE) y reforzar su autonomía; lucha contra la corrupción; y preparar soluciones para los siguientes gobiernos, para hacer sostenible la seguridad social y garantizar una mayor progresividad en el sistema impositivo.
Préstamo del FMI
El pasado miércoles 30 de septiembre, el Directorio Ejecutivo del FMI confirmó que aprobó un acuerdo de 27 meses en el marco del Servicio Ampliado (SAF) del FMI con Ecuador. El acuerdo incluye un monto equivalente a $6.500 millones. El financiamiento tiene un plazo de 10 años, con cuatro de gracia y una tasa de interés del 2,9%. Por sus características «excepcionales», el país accede a financiamiento equivalente a un 660% de cuota en el FMI, mucho mayor a la que pudo haber accedido en condiciones normales.