Para el analista político Mateo Martínez, la pandemia por el Covid-19 ha servido como una “especie de corcho de una botella que está a punto de estallar”. Además, indicó que en cualquier momento se reactivará, refiriéndose al año transcurrido tras las protestas que paralizaron al país entre el 2 y el 13 de octubre de 2019.
“El país ha atravesado por una serie de acontecimientos terriblemente difíciles, como la pandemia y la aplicación del programa de ajuste neoliberal del gobierno”, dijo Mateo Martínez, en diálogo con el noticiero A Primera Hora, de Majestad radio, al considerar que la crisis sanitaria fue utilizada como una herramienta por el gobierno para bloquear la fase posterior a los hechos de octubre.
Recordó que el régimen enfrentaba un bloqueo político en la Asamblea, ya sin mayoría ni alianza política, y las amenazas de nuevas protestas de los indígenas, que lo tenían “contra las cuerdas”, hasta que llegó la crisis sanitaria.
Sobre las protestas de octubre de 2019
El analista admitió que luego de las protestas, el movimiento indígena quedó golpeado. Esto lo dijo, debido a las acusaciones de vandalismo y hasta señalamientos racistas, pero rechazó criterios de que sus dirigentes “se vendieron”. Explicó que al interior de organizaciones como la CONAIE hay diversos criterios.
Mateo Martínez insistió que lo de octubre de 2019 fue una expresión plural, que no se circunscribió a los indígenas. Y destacó los informes de la CIDH y ONU sobre los niveles de represión, muertos, heridos y detenidos.
“En los hechos, en lo que visible y contrastable, creo que el derrocar al gobierno no era la orientación de octubre”, sentenció.
El analista brindó sus expresiones tras las protestas que buscaron la eliminación del decreto 884 que eliminaba el subsidio a los combustibles. Tras ello, los conductores de buses, taxis, transporte público, privado, entre otros, se movilizaron en todo el país. Posteriormente, el movimiento indígena llegó hasta la capital para también concentrarse contra la decisión.