Steven Petersen, el entonces viceministro de ambiente, presentó su renuncia irrevocable a la cartera de Estado. El motivo: la decisión de despedir a 398 funcionarios del Ministerio de Ambiente.
En un documento remitido el 1 de octubre, Petersen dijo que le resulta preocupante la separación de los trabajadores. «Este tipo de decisiones afecta gravemente a la gestión ambiental en el país», señaló el ex viceministro. Añadió que afecta más «considerando la reserva con la que se manejó este proceso, al no coordinar dichas acciones con los Directores Zonales, Subsecretarios y Viceministros con la finalidad de evitar despidos de funcionarios esenciales».
Explicó que los despidos provocaron que en varias direcciones se desvinculen a biólogos, veterinarios y personal que realiza labores inherentes al Ministerio.
Pero, además, Petersen criticó la falta de comunicación entre el Ministerio de Ambiente y el Ministerio de Finanzas. En la misiva dijo que «resulta sorprendente la falta de gestión ante las autoridades de finanzas y trabajo para evitar que se continúe desvinculado personal, a pesar de la apertura de dichas autoridades para plantear estrategias que nos permitan evitar consecuencias perjudiciales a la gestión ambiental», alertó.
Entre las observaciones, planteó la necesidad de mantener acuerdos con la cooperación internacional y canalizar la ayuda que remiten.
Según el exviceministro los despidos en esa cartera continuarán y, por ello, advirtió que las desvinculaciones afectarán la operatividad del Ministerio de Ambiente.