Las flores amarillas de los guayacanes se convierten en un espectáculo natural para el turismo en el sur de Ecuador.
Desde los primeros días de enero ya comienzan a florecer los árboles de Handroanthus Chrysanthus.
No por esperado este momento deja de ser un acontecimiento que cada año atrae a cientos de turistas inclusos del país.
Reserva Ecológica Arenillas
Un sitio a donde no se puede dejar de si para apreciar este evento de la naturaleza es la Reserva Ecológica Arenillas.
Aunque es común encontrar guayacanes en otras zonas cálidas también del país.
Varias comunidades se benefician también con el turismo, como son Guabillo, Carcabón y Chacras.
El sitio ha sido acondicionado para la llegada de visitantes con la construcción de baños y la readecuación de senderos, por ejemplo.
También se han levantado puentes y se restauró el centro de interpretación.
Esta Reserva Ecológica Arenillas tiene una extensión de 13.170,025 hectáreas de bosque seco tropical.
Es considerado uno de los remanentes más importantes de vegetación xerofítica en la costa ecuatoriana y una de las áreas más extensas de bosque y matorral seco del suroeste, según confirmó el Ministerio de Turismo.
Este sitio se caracteriza por tener una gran variedad de especies de flora y fauna endémicas en la zona.
También el cantón Zapotillo en la provincia de Loja hay un espectáculo similar.
En Guayas también florecen y a lo largo de la vía a la costa es posible disfrutar del paisaje que ofrecen a los visitantes.
Los guaiacum
Los ‘guaiacum’ son conocidos como guayacanes (Tabebuina chrysanta, su nombre científico) o árboles de madera dura.
Se constituyen una especie de los bosques neotropicales y tropicales de América, desde México hasta Ecuador. Aquí se los encuentra en Esmeraldas, en Manabí, Guayas hasta El Oro.
El sitio Ecuador forestal precisa que esta especie proporciona una de las maderas más pesadas y duraderas porque es muy resistente al comején.
Su resistencia le permite ser empleada en la ebanistería y carpintería, incluso para partes para vehículos; carrocerías, carruajes, vagones, ejes de carreta e instrumentos musicales como los arcos para violín.
Incluso hasta para las cañas para pescar y para los sistemas silvopastoriles, linderos, como sombra y ornamental.
Los expertos aseguran que es excelente para la producción de miel y se ha encontrado que el extracto de la corteza se usa como medicina.
Tiene tres metros de altura y una copa estimada en 10 metros.
Se estima que esta planta tiene una vida de 50 a 100 años.
Cuando pensamos que el espectáculo se acaba en las copas, comienza en el suelo alfombrado con las flores que caen. Este es también el momento de la polinización.
El guayacán tiene una madera resistente que le permite afrontar los embates del bosque y tener varios usos.
En septiembre también florecen guayacanes pero generalmente lo hacen en diciembre, cuando aparecen las primeras lluvias del invierno.
Desde 1998 este ha comenzado a ser también otro atractivo turístico para Ecuador.